Los dos pilotos salen ilesos de este aparatoso accidente en Nürburgring
Un BMW M2 y un Porsche 911 GT3 RS chocaron en una zona rápida, haciendo volar al Porsche. Por suerte, sólo hubo daños materiales.
Foto: GTBoard.com / Facebook
Por: Brian Silvestro
Traducido por: Javier Llorente
8 jul a las 09:00
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Los conductores de un BMW M2 y un Porsche 911 GT3 RS tuvieron suerte de salir con vida tras un aterrador accidente en Nürburgring el pasado sábado, que dejó ambos coches destrozados.
La colisión se produjo durante una sesión de acceso general (Touristenfahrten) en la parte más rápida del circuito. El Porsche salió despedido por los aires y ambos vehículos quedaron envueltos en llamas.
Las imágenes de las cámaras de vigilancia y el vídeo del interior del Porsche, publicados en YouTube, muestran cómo el 911 intenta adelantar al BMW por el lado izquierdo de Kottenborn (lo reglamentario, adelantar por la izquierda), antes de que los coches entren en contacto.
El toque provoca que ambos conductores pierdan el control y se estrellen contra la barrera a gran velocidad. El 911 salta por los aires, al tiempo que estalla una bola de fuego.
Toda la parte delantera del GT3 RS queda arrancada en el choque, con piezas de la suspensión y de la carrocería esparcidas por el circuito. Al M2 no le fue mucho mejor, con la parte delantera destrozada y varios paneles de la carrocería literalmente desintegrados.
De alguna manera, ambos pilotos salieron ilesos del incidente, según informa Road & Track. Un vídeo publicado en TikTok (más abajo) muestra los daños con más detalle, así como los grandes destrozos causados en las barreras de seguridad.
¿De quién es la culpa?
A juzgar por el vídeo, es difícil decir quién tiene la culpa. Algunos podrían argumentar que el conductor del BMW no dejó suficiente espacio al Porsche para adelantar, o simplemente no sabía que estaban intentando rebasarlo.
En cambio, otros dirán que el conductor del GT3 debería haber tenido más cuidado, dada la falta de cortesía del conductor del M2 y el peligro asociado a esa zona de la pista. Sospechamos que en las redes ya habrá opiniones para todos los gustos.
En cualquier caso, un accidente como éste no ayuda a los aficionados. La belleza de Nürburgring es la posibilidad de llegar con cualquier coche homologado y poder disfrutar de la experiencia. Incidentes así podrían hacer que la dirección se replantee esa política, a menos que los conductores muestren más precaución y respeto por la pista.
Manténganse en el asfalto, amigos.